Odiseo regresa por segunda vez a Ítaca

Odiseo regresa por segunda vez a Ítaca

Poco importa, al regreso de Odiseo,
que en la mañana de azafrán lo abrace
la fiel Penélope, si el desenlace
no te involucra a ti, querido Eumeo.

Poco importan las líneas de los largos
celajes en la tierra de la gente
que no sabe del mar, si estás ausente,
mi porquerizo que cuidó de Argos.

Poco importa el aedo que declama
de memoria la lid de los ayeres.
Poco importa Atenea tras la trama.

No hay paz en Ítaca y el vino quema
si no estás tú, quien fueras y aún eres
la segunda persona del poema.

Pedro Poitevin

Odiseo regresa por segunda vez a Ítaca